En la historia de la humanidad, el trabajar y aprender juntos es algo bastamente difundido, pese a que recién a fines del siglo XX surge el concepto de aprendizaje colaborativo, transformándose en un tema de estudio en el que se ha teorizado bastante. El constructivismo sociocultural ha servido como marco teórico para este enfoque del aprendizaje, el que afirma que todo aprendizaje es social y mediado. Surge entonces la pregunta, ¿cuál es la razón para que el aprendizaje colaborativo tenga hoy tanta importancia, no sólo en la teoría sino también en los procesos de aprendizaje y producción, en circunstancias de que es un fenómeno con orígenes tan ancestrales?
En la actualidad, observamos que el resurgimiento de un nuevo paradigma, se da paralelamente a los cambios que se vienen produciendo en el orden mundial. Realidades tales como la globalización, la integración continental, las comunicaciones satelitales y el espacio cibernético, nos muestran que vivimos en un mundo global donde todo está relacionado.
En tal sentido, este escenario ha obligado a los responsables de la educación a pensar en nuevas opciones curriculares que permitan formar las nuevas generaciones con una visión tanto del mundo como del conocimiento que reciben, motivo por el cual se hace necesario la incorporación de tecnologías de información y comunicación en el proceso de formación docente bajo un enfoque colaborativo en la modalidad de educación a distancia, esto trae como beneficios la disminución de tiempos, costos y a su vez el incremento de la calidad en cuanto a formación docente se refiere.
Un proceso de aprendizaje colaborativo consiste en que las partes se comprometen a aprender algo juntos, lo que debe ser aprendido sólo puede conseguirse si el trabajo del grupo es realizado en colaboración, es el grupo el que decide cómo realizar la tarea, qué procedimientos adoptar, cómo dividir el trabajo, las tareas a realizar la comunicación y la negociación son claves en este proceso.
Siguiendo el mismo orden de ideas, en cuanto a la capacitación mediante el enfoque colaborativo se promueve la adquisición de destrezas y a su vez su aplicación, el trabajo de este enfoque es de rigor científico y sistemático, que a su vez debe contar con la capacidad del docente para el manejo de la informática e integrar esta tecnología a sus clases lo cual promueve el interés de sus alumnos.
Por otra parte, en cuanto al nivel del personal docente en una institución universitaria se refiere a que se debe seguir una serie de pasos que faciliten la implementación de dicho enfoque antes mencionado, entre los cuales podríamos destacar:
v El primer paso debe ser atender la formación docente en cuanto a la incorporación tecnológica.
v Adecuación emocional para el ejercicio colaborativo que permita construir grupos de aprendizaje y trabajo con capacidad de reflexión colectiva, así como el uso de tecnologías estableciendo el anclaje motivacional promoviendo el uso de las TIC´s.
v El trabajo y el aprendizaje a pesar de ser procesos que van de la mano continúan siendo distintos en muchos sentidos en ambos caso es de gran utilidad proporcionar herramientas que les permitan aprender de forma grupal.
v El punto de partida es trabajar en constitución de estos grupos colaborativos hasta ser transformados en el elemento principal del proceso de cambio institucional.
v La formación de dichos grupos definirán zonas de interés y propondrán proyectos de los cuales serán responsables, es de gran importancia resaltar que estos grupos deben ser de carácter voluntario en cuanto a su funcionamiento.
v Por último, estos grupos deben obtener y negociar apoyo político, gubernamental y de otras universidades o instituciones para el desarrollo progresivo de cambio cultural hacia la tecnologización para así promover la unificación de criterios educativos y obtener una educación de calidad.
Con relación a los estudiantes, es conveniente conocer el proceder llevado a cabo desde una perspectiva de Educación a Distancia, para lo cual se considera oportuno analizar los siguientes aspectos:
v Luego de aprobar el ingreso a la institución, se aplicará un curso de iniciación, donde se comenzará a trabajar con los encuentros virtuales y con la modalidad educativa de la institución, donde será el aprendizaje independiente, esto para adaptar al estudiante a la nueva forma de enseñanza-aprendizaje.
v Se colocará el pensum de estudios en la web, previa autorización, con los programas de las materias que lo integran, cada una tendrá enlaces con información sobre su contenido y temática, tipos de evaluaciones a aplicar, interacción docentes-estudiantes mediante foros, esto para que conozcan teoría e información sobre su contenido, estructura de las materias y como se evaluará.
v Esta información debe estar en la página web del instituto, este programa se desarrollara en el 80% del tiempo del curso, donde deberá adquirir los conocimientos y fortalecerlos con las charlas o discusiones presenciales realizadas con el docente, donde el mismo observará si se cumplió con los objetivos que se desarrollaron en el proceso.
v Se realizarán grupos de trabajos de 3 estudiantes, los cuales deberían agruparse según el sitio de residencia para así poder reunirse, para formar centros de investigación y estudios, los cuales deberían mantenerse por el resto de la carrera. Ya que al estar ubicados en la misma zona, hace que el aprendizaje sea compartido.
v Se debe realizar encuentros presenciales docente-alumno para poder corroborar el aprendizaje observado en el escenario virtual y así poder demostrar estrategias de enseñanza por el docente en formación.
v El tiempo de duración del curso será discutido previamente con los estudiantes, además de la planificación de las clases presenciales y virtuales, aparte de la organización de las evaluaciones, para que así previo consenso se respeten los días pautados para dichas asignaciones.
v Para el curso de iniciación, se asignará a un docente para que acompañe al estudiante por un periodo de 16 horas presenciales, las cuales se dividirán en 4 sesiones de 4 horas cada una, donde el estudiante tendrá 3 sesiones practicas y una teórica, en la cual el trabajara con la ultima versión de Windows, Word, Excel, Power Point e internet. Donde aprenderán a abrir una cuenta electrónica, consultar páginas educativas, participar en foros y chat. Para así introducirlos al mundo virtual y hacer más fácil el camino para el aprendizaje. Todo esto debe ocurrir en un laboratorio de informática, de no existir el mismo, deberán ir a un centro de navegación, donde puedan ubicarse por computadora y al final cancelar el costo del alquiler del equipo cada quien.
v En el cada curso se deberá motivar e incentivar al uso pedagógico de la informática, se debe leer, analizar y discutir sobre el tema, para que los estudiantes se involucren en esta rama de la educación, ya que las nuevas generaciones son más hábiles con dichas herramientas y así desde las escuelas poder explotarlas para el aprendizaje.
v Se debe crear conciencia sobre el uso de las tecnologías en educación, por medio de debates, discusiones y estudios realizados, ya que los mismas no deben ser utilizadas por los niños como distracción, ni confiar en toda la información que allí se encuentre, ya que este es un universo enorme de información y no todo es cierto y confiable.
v Involucrarse emocionalmente en el uso pedagógico de la informática, para así hacerlo mejor cada vez y estar motivado al momento de la enseñanza.
v El estudiante se debe esforzar mentalmente en el trabajo pedagógico al usar la tecnología, ya que al estar ambas unidas debe ser más fácil y divertido el aprendizaje.
El currículo desde sus inicios ha sido visto como el elemento sobre el cual se sostiene el proceso educativo, así lo han expresado de una u otra forma diversos autores, por ejemplo: Bobbit (1917), Tyler (1949), Taba (1979), Stenhouse (1980), Gimeno (1992), Fernández (2007), entre otros.
A tales efectos se asume el currículo como: las intenciones que reflejan el cómo, cuándo, con qué, de qué manera se desarrolla el proceso de enseñanza-aprendizaje en un contexto determinado, orientado por los fines de la educación y operacionalizado en el diseño curricular, a través de los proyectos institucionales. Es decir, que en el currículo convergen una serie de aspectos (legales, filosóficos, psicológicos, pedagógicos, entre otros) que hacen posible el proceso de formación de los ciudadanos, en el marco de la educación universitaria. Hablar hoy en día de currículo, es hablar como lo plantea López (2005) de un término “polisémico, polimorfo y poliédrico” (p.108), todo esto como consecuencia de los diferentes usos y atribuciones que se le han dado al mismo.
En la literatura especializada que aborda la problemática que a nivel mundial se vive en el campo educativo, se evidencia que en los inicios del siglo XXI el mundo está demandando cambios a nivel curricular, que produzcan efectos positivos en los sistemas educativos de los diferentes países, y por ende en el mundo. En cuanto a la administración del currículo se podría plantear:
v Revisar y actualizar cuanto antes los programas de los distintos cursos, fases y actividades electivas de extensión académica acreditable, diseñando e incorporando un eje transversal sobre el uso pedagógico de la informática.
v Realizar entrenamientos progresivos, continuos e intensivos del personal docente, con la finalidad de ir profundizando en el abordaje de esta área.
v Evaluar permanentemente procesos, productos e impactos.
v Asignar un papel importante al uso de estrategias cognitivas, metacognitivas y afectivas en el procesamiento de la información, en su recuperación y en su uso permanente durante el trabajo pedagógico.
v Enfatizar la enseñanza de cómo pensar, estimulando el desarrollo del pensamiento lógico formal.
v Evaluar constantemente las tendencias educativas actuales para saber qué cambios tecnológicos es necesario introducir, por qué, dónde para qué y cuándo.
v A nivel de cada programa, desarrollar talleres internos para conocer, criticar y profundizar los materiales con el fin de volcarlos progresivamente a los formatos de hipertextos, la modalidad informática más rica de interacción implica la hipermedia educativa.
v Evaluar materiales y criterios subyacentes en las TIC´s, su concepción y funcionamiento.
v Propiciar aprendizajes generativos, participativos, anticipatorios e interdisciplinarios.
v Realizar y promover un uso inteligente (crítico y reflexivo) de la tecnología, no apresurado y poco profundo.
v Estimular la capacidad de producción en docentes y estudiantes.
v Adentrarse con auténtico compromiso en el proceso de aprendizaje inscrito dentro de un proyecto educativo que contemple, contenga y oriente el uso pedagógico de la tecnología.
v Incorporar indisolublemente unidos contenidos y procesos.
v Rescatar la interactividad pedagógica y su dimensión socioemocional que favorecer el desarrollo de las funciones psicológicas superiores en los estudiantes.
v Tomar en cuenta que todo trabajo de aprendizaje, más aún el mediado por TIC´s necesita desmontar esquemas de pensamiento y representaciones sociales con el fin de profundizar el conocimiento científico y de afianzar reales vínculos interactivos y productivos.
v Favorecer la inclusión de cursos optativos sobre el uso pedagógico de la informática, a nivel de profundización I y II y de las actividades electivas de extensión académica.
v Promover el desarrollo de una cultura evaluativa clara y comprometida, que atraviese los programas, proyectos, materiales y tecnologías, dentro de un encuadre ético y de crecimiento compartido.
v Se constituirán grupos colaborativos para la reflexión e investigación sobre el proceso de administración curricular.
En cuanto al diseño de material instruccional:
v Incorporar estrategias de autorreflexión y autorregulación del aprendizaje, que constituyan un verdadero ejercicio de autoevaluación.
v Tomar en cuenta la forma de diagnosticar el nivel de conocimiento previo que poseen los estudiantes sobre cada tema o contenido.
v Incorporar ejemplos de transferencias de los contenidos desarrollados a contextos reales.
v Una vez actualizado, iniciar el traslado del material al formato virtual, incorporando efectos sonoros y correspondencia entre los íconos y los materiales.
v El material debe proponer actividades remediales y estrategias para la participación activa del estudiante.
v El contenido debe estar actualizado, poseer rigor científico y ser coherente con los objetivos establecidos.
v La actualización de materiales será acometida por grupos de especialistas de los Núcleos, extensiones y Centros de Atención, que estén trabajando con estudiantes y presenten propuestas sometidas a la consideración de expertos, mediante concursos.
v Promover a través del material la reflexión y criticidad a partir del diálogo estudiante-contenido, estudiante-estudiante y estudiante-docente.
v Incluir en las nuevas ediciones de las selecciones de lectura un hilo discursivo que facilite el auto aprendizaje.
v El material propiciará simultáneamente la interacción, la investigación, la producción y la evaluación formativa.
v El uso de las aplicaciones tecnológicas como apoyo para mejorar el aprendizaje, aumentar la productividad, promover la creatividad, desarrollar estrategias, resolver problemas y tomar decisiones informadas usando herramientas como el procesador de palabras, las bases de datos, gráficos, hoja de cálculo y otros recursos tecnológicos se integrarán a través de todo el contenido curricular.
v Los materiales tendrán una estructuración que favorezca el desafío, el desarrollo y la aplicación.
v En las actividades propuestas se hará énfasis en la lectura, la escritura y la discusión.
v Es importante considerar los aspectos estéticos del diseño de materiales, a objeto de que éstos resulten atractivos y motivadores para docentes y estudiantes.
v El diseño de materiales debe tender hacia el desarrollo de innovaciones que representen soluciones nuevas en materia de aprendizaje y formación docente.
v La fundamentación teórica del diseño de materiales debe apoyarse en los enfoques cognitivo y constructivista, pues son los más adecuados para el aprovechamiento de los recursos tecnológicos además de resultar coherentes con las bases del diseño curricular administrado por la UPEL y por tanto en el IMPM.
v En el diseño de materiales instruccionales de carácter virtual deben tomarse en cuenta la naturaleza del aprendizaje, su direccionalidad, el proceso de construcción del conocimiento, el uso de estrategias de pensamiento complejas, la motivación y la naturaleza de las asignaciones, la influencia del entorno y los diferentes estilos de aprendizaje.
v Contextualizar el aprendizaje con problemas relevantes, a fin de permitirle la apropiación del aprendizaje, haciéndolo igualmente significativo para quien aprende.
Por muchas razones antes expuestas, se hace evidente que la incorporación de las tecnologías en nuestra sociedad académica es una realidad ineludible que debemos comenzar a canalizar y dar el uso adecuado en los procesos de enseñanza y aprendizaje; es por ello que, desde el punto de vista de las asesorías e indicaciones que sugiere el docente al estudiantado, bien sea de manera individual o grupal, es necesario tomar en cuenta ciertas consideraciones que se plantean como beneficiosas durante este proceso, a saber:
v La ejecución de una asesoría electrónica que garantice una real orientación a los estudiantes.
v Considerar los foros electrónicos o cualquier otro tipo de técnica pertinente a las tecnologías y llevarlas a cabo desde el punto de vista del intercambio de ideas entre grupos, apreciando las producciones intelectuales de los estudiantes.
v Propiciar la búsqueda acertada de información en la web, tomando en cuenta una adecuada orientación que le permita al educando discernir entre “las buenas o malas informaciones”.
v Promover encuentros electrónicos con especialistas de otros países (virtud bondadosa de la que podemos disfrutar a través de la educación a distancia).
v Mantener un enlace productivo con respecto a las asignaciones individuales, estando el docente en la obligación de responder y sugerir (vía electrónica) y a tiempo, de las debilidades y fortalezas que poseen las producciones del estudiante.
v El docente debe ser garante de cumplir en el envío de las observaciones (reflejadas de manera formativa o sumativa) con el propósito de que el estudiante esté consciente de su evolución académica.
v El docente no debe descuidar el proceso de asesoría durante las fases de inicio, desarrollo y culminación del lapso académico.
Ahora bien, los cambios que nos propone la aplicación de las nuevas tecnologías en materia de evaluación de los aprendizajes se ha convertido en una gran incertidumbre por el hecho de considerar que no hay un acercamiento constante (personal) entre los docentes y los educandos; sin embargo, desde el punto de vista colaborativo inserto en la modalidad de Educación a Distancia, se considera oportuno señalar que parte de su efectividad pueden depender de:
v Desarrollo de un diagnóstico habitual que permita conocer las condiciones académicas y de aprendizaje que poseen los estudiantes.
v Promoviendo consciencia en la realización de actividades, abandonando el uso cómodo de las tecnologías, tomando en cuenta un verdadero proceso de investigación que invite al estudiante a analizar y producir de manera oral y escrita (sin plagios electrónicos).
v Hacer ver a los estudiantes la productividad de lo aprendido en la vida cotidiana, llevando a cabo una transferencia de los saberes abstractos a funcionalidad y concreción.
v Tomar en cuenta la aplicación de instrumentos válidos para la evaluación de los aprendizajes.
v Proporcionar a los estudiantes un boletín que informe sobre sus alcances y limitaciones a fin de profundizar en ellas y mejorar su desempeño.
Publicado por: Borzellino Adriana, Briceño Carla, Pineda Yilmer y Rodríguez Sioreh.
Publicado por: Borzellino Adriana, Briceño Carla, Pineda Yilmer y Rodríguez Sioreh.
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